¿Generación ni-ni?

Esta es la pregunta que yo creo que muchos padres nos estamos haciendo un día sí y otro también: ¿Qué está pasando con nuestros jóvenes? Estamos criando y me incluyo, una generación de super dotados para la tecnología, pero que no quieren saber de nada más. Son la generación ni-ni.

¿Qué se está haciendo mal? Pues entre otras cosas, yo creo en mi humilde opinión, adelantar todos los procesos... Cada vez se empieza antes a experimentar todo, a salir, a tener móviles de última generación, a tener dinero, a tener en definitiva de todo. Nada les ilusiona ni sorprende, porque ya no es como antes, que el día del cumpleaños o los tan deseados reyes, nos encontrábamos los regalos con una enorme sorpresa. Ahora ni les hacen apenas ilusión. Ni la tarta de cumpleaños, que muy gustusamente les podemos preparar en casa, les emociona, porque la comemos cualquier día que nos apetezca... Y además ¡está más rica la comprada!.

Creo que en algunas cosas les estamos obligando a madurar, por ejemplo ahora con la "maravillosa LOMCE", perdonemne la sorpresa, pero... ¡que unos niños de 14 años tengan que decidir ya sobre su futuro! me dejó alucinando. Y ¡saber ya si se van a decantar por ir a la universidad o por una formación profesional!... Con todos mis respetos, en mi generación, decidíamos cuando terminábamos BUP o COU, cuando teníamos 17 o 18 años, ¿teníamos la misma madurez que ahora? Pues lo siento por los que hayan pensado la tan maravillosa ley, pero han metido la pata. Nuestros hijos no tienen la misma madurez con menor edad, por mucho que sepan. Están más adelantados que nosotros en muchas cosas, pero maduran más tarde. Además que esto de la LOMCE se está preparando, para retroceder. Volverán a estudiar los que tengan mayores recursos económicos y los demás se irán quedando "aburridos" por el camino. Me suena a criba... Eso sí con los mejores móviles.

Y la inmadurez y falta de motivación y autoestima... Por ejemplo en las labores de casa les falta madurez, porque... es muy aburrido hacer las tareas del hogar. Ya todo es aburrido, para nuestros jóvenes, incluso para los niños y eso se traduce en falta de motivación para todo. Porque son ni-ni.

Ni son imaginativos si no es con la teconología en las manos... Ni tienen autoestima... Pero si los padres salimos en defensa de los niños en todos sitios. Ni saben hacer nada por sí solos, ¡cómo no van a tener baja la autoestima!
Y ya no hablemos de valores, pero ¿qué es eso?... Ya no se lleva eso de la solidaridad, ni les suena. El compartir, ni se lleva. Ser buen compañero, ¿para qué?, ni me apetece...
Y todo esto en qué se traduce:

- en aburrimiento, porque ya los juegos son pocos, al que le gusta el fútbol, bueno, sino la tecnología, así que ni lo intento.

- en falta de motivación, ¿para qué voy a estudiar si no hay trabajo?, por eso ni estudio, ni me esfuerzo.

- jóvenes sin sueños y metas en la vida -- Qué duro se me hace pensar que no puedan tener ilusiones. Que jueguen con la imaginación soñando en lo que serán de mayor. Que sientan que les queda tanto por descubrir en la vida y que se noten impacientes. Pero casi ni les importa el futuro.

Yo lo tengo claro. Sin duda creo, que tenemos mucho que transmitir a nuestros hijos, niños y jóvenes. Que aunque muchos adultos podamos vivir el futuro como incierto, también es verdad que también nuestros padres lo vivieron así por nosotros. No les dejemos sin ese futuro anhelado, ilusionemosles de nuevo y hagamos que sueñen con él. ¡Venga, vamos a intentarlo!